Aparcar en doble fila es una práctica común, pero puede traer consecuencias legales y molestias al tráfico. Aunque está prohibido y sancionado con una multa de 200 euros según la Ley de Tráfico y Seguridad Vial, hay excepciones en las que se permite una detención breve. La clave está en diferenciar una parada de un estacionamiento: el conductor debe permanecer dentro del vehículo, el tiempo debe ser menor a dos minutos, y no debe afectar la circulación ni poner en peligro a otros conductores.
7Precauciones para evitar conflictos con otros conductores
Aparcar en doble fila puede ocasionar tensiones con otros usuarios de la vía, especialmente si sienten que su paso está siendo obstruido. Es fundamental ser consciente del entorno, no ocupar más tiempo del estrictamente necesario y evitar gestos de confrontación si alguien señala que su vehículo está en su camino. Ser respetuoso y mostrar disposición para mover el coche puede aliviar el estrés de la situación. Además, colocar su vehículo de manera que permita cierto margen de maniobra para otros usuarios reducirá posibles roces.
