Según un informe reciente publicado por Carfax, uno de cada diez coches familiares en España presenta algún tipo de riesgo en carretera. Esta estadística revela datos preocupantes como que el 14 por ciento de los vehículos familiares circulan con uno o varios factores que podrían poner en peligro a los ocupantes. Entre estos riesgos se incluyen haber sido utilizados como vehículos de alquiler o presentar discrepencias en el kilometraje.
Para Carfax, después de analizar más de dos millones de vehículos familiares en España, lo que supone más riesgo es que el 6 por ciento de modelos que tienen un pasado en flotas de alquiler. Esta tendencia es especialmente notable en el segmento de los C-SUV, donde dos de cada diez coches con riesgos provienen de empresas de arrendamiento.
Pero ese historial se amplía con otros casos como las inconsistencias en el kilometraje, que representan el 3 por ciento de los riesgos. Este problema puede llevar a una falsa percepción sobre el estado real del coche, lo que puede derivar en que se tomen decisiones de mantenimiento y seguridad en función de unos kilómetros que no son los reales.
Los factores que influyen en el riesgo de los coches
Otro de los factores es el de las importaciones que suponen un 2 por ciento de los riesgos relacionados con vehículos importados, que pueden no cumplir con todos los estándares de seguridad locales. Y con otro 2 por ciento se pueden anotar lo accidentes o daños previos, que pueden afectar a su integridad estructural y seguridad.
Analizando los datos en función de la edad de los coches, vemos que modelos como el Dacia Duster, Nissan Qashqai y Toyota Corolla muestran una menor antigüedad comparada con la media nacional. La edad promedio de estos vehículos es de 10,2 años, frente a los 13,5 años del promedio general de todos los coches en circulación. Además, el kilometraje medio de estos modelos es de 157.000 km, similar a la media nacional.
Al desglosar los datos por segmentos los B-SUV tienen una antigüedad mucho menor, con una media de 5,1 años y un kilometraje medio de 88.000 kilómetros lo que refleja un mayor interés y rotación por parte de los consumidores. En el caso de los C-SUV, estos vehículos presentan una edad media de 7,1 años y un kilometraje medio de 123.000 km. Por último, los modelos de los segmentos C y D, donde se incluyen algunos de los coches más vendidos y tienen una antigüedad y kilometraje superiores, con 12,8 años y 179.000 km respectivamente.
El estudio también revela que el 65% de los coches de los segmentos C y D tienen 10 años o más, cifra superior al 58 por ciento de la media de coches familiares españoles con esta antigüedad. Esta información es crucial para los compradores y vendedores de coches familiares, ya que resalta la importancia de realizar verificaciones exhaustivas del historial del vehículo antes de la compra.
Aunque la edad y el kilometraje de los coches familiares en España pueden parecer razonables, los riesgos asociados a su historial no deben ser subestimados. De ahí el valor de que los consumidores utilicen herramientas como las proporcionadas por Carfax -que controla el historial del vehículo- para asegurarse de que están tomando decisiones informadas y seguras al adquirir un vehículo familiar.