El mundo del taxi es un escenario donde los vehículos enfrentan pruebas extremas. Desde largos trayectos diarios hasta condiciones variables de conducción, los taxis son auténticas herramientas de trabajo y, como tales, deben cumplir con una serie de requisitos clave: eficiencia, durabilidad y confort. En este contexto, es común escuchar opiniones contundentes de quienes se dedican a este oficio, y no sorprende que algunos modelos de coche se ganen una mala reputación entre los taxistas. Aquí exploramos uno de esos casos.
1Los requisitos de un buen coche para taxi
Para un taxista, el coche no es solo un medio de transporte; es una herramienta indispensable para su día a día. Por ello, sus expectativas hacia un vehículo son muy claras. Entre los factores más importantes se encuentran el consumo eficiente de combustible, la resistencia al desgaste y la comodidad tanto para el conductor como para los pasajeros.
Sin embargo, no todos los coches cumplen con estas expectativas, y cuando uno falla en alguno de estos aspectos, rápidamente se convierte en un modelo rechazado dentro del gremio. Así es como algunos automóviles pasan a ser “candidatos indeseables” para cualquier taxista experimentado.