Mini ha escogido el año 2023 para lanzar su primer modelo «nacido en Alemania», saliendo de las líneas de montaje de la planta del Grupo BMW en Leipzig. Se trata de la producción del sucesor del actual Mini Countryman, tanto la versión de combustión como la eléctrica.
Con esto, la firma quiere reforzar su compromiso con la electromovilidad y el segmento crossover. El futuro Mini Countryman llegará con una opción de tracción delantera o integral, con motores de gasolina o diésel, o con una tracción totalmente eléctrica.
El Director de BMW Group Plant Leipzig, Hans-Peter Kemser, ha asegurado que «en los últimos años, hemos trabajado continuamente para llevar nuestra planta a un futuro éxito. Este contrato para producir el sucesor del Mini Countryman nos da otro gran hito en el que trabajar«.
Una inversión de más de 100 millones de euros
La planta del Grupo BMW en Leipzig, que podrá suministrar una amplia variedad de motores para la próxima generación del Countryman, es el lugar de nacimiento de la electromovilidad de la firma germana. Desde 2013, ha fabricado más de 200.000 BMW i3 y BMW i3s. En los próximos años, irán un paso más allá gracias a una inversión de más de 100 millones de euros que ha supuesto una nueva instalación de montaje de componentes de tracción electrónica.
