Conseguir mantener alejada la pintura del coche de los arañazos y los golpes es una de las mayores obsesiones de todo conductor que se precie, cuando se compra un coche nuevo. Retrasar al máximo la aparición de este tipo de desperfectos en la carrocería nueva puede ser una tarea muy estresante y también prácticamente imposible.
Cuando vuelves a recoger tu flamante coche nuevo y descubres que alguien le ha hecho un rallón, es normal que te lleves una decepción. Con el paso de los años esa preocupación se transforma en resignación, y los rayones empiezan a convertirse casi en una colección. Estés en el punto que estés con tu coche, en este artículo te traemos una serie de consejos para borrar los arañazos y dejarlo como recién salido de fábrica.
2Método para reparar arañazo: pulimento o ‘polish’
En el mercado se venden muchos productos para tratar de arreglar los arañazos, o al menos minimizarlos. Si la marca es poco profunda puedes tener suerte y conseguir un resultado casi impoluto. Independientemente del producto que elijas el primer paso de empleo será limpiar y secar muy bien la zona que vayas a reparar, para que no haya partículas incrustadas que perjudiquen la operación.
El Pulimento o ‘polish’ es el producto más utilizado y, de hecho, los resultados son más que aceptables siempre que el arañazo no sea demasiado profundo; en tonalidades claras el acabado es sensiblemente mejor. Hay distintas opciones de pulimento, dependiendo de lo que quieras conseguir. Los más básicos son las pastas ‘eliminaarañazos’, son una opción sencilla de utilizar y muy barata.