La variedad de situaciones que un conductor de vehículos motorizados debe enfrentar en el día a día son infinitas.
Aquello que nos enseñan tímidamente en la clase teórica y práctica de la autoescuela puede no ser suficiente para la inmensa cantidad situaciones que un conductor amateur o profesional debe enfrentar durante su itinerario diario. Además de las normas básicas de circulación, hay mucho más que conocer para tener éxito como conductor.
A lo largo de este artículo, discutiremos algunas cosas que quizás no aprendiste en la autoescuela, tales como el verdadero significado de las señales de tráfico, trucos y consejos útiles para mejorar tus habilidades al volante, prevención para evitar accidentes de tránsito, y mucho más.
3Prevención para evitar accidentes de tránsito
Otra cosa que no suele aprenderse en la autoescuela, pero es de suma importancia es la prevención de los accidentes de tráfico. Los accidentes de tráfico pueden deberse a una variedad de factores, entre los que se incluyen la velocidad excesiva, los errores humanos, los errores mecánicos, desvíos ilegales, etc. Para prevenir los accidentes producidos por tales factores, necesitamos poner en práctica algunos principios básicos de prevención, y los más importantes entre ellos son los siguientes:
-Usar siempre el cinturón de seguridad al conductor y a los pasajeros cuando se viaja en la misma cabina. Esta es sin duda una de las medidas más esenciales de prevención de lesiones graves o mortales.
Sin duda, la práctica es esencial para todos aquellos que conducen vehículos. Una práctica regular ayuda mucho a desarrollar la destreza en la conducción, desarrollar la confianza en sí mismo mientras maneja, automatizar varias decisiones de conducción, y ensanchar el conocimiento general sobre las prácticas seguras.
No hay suficiente práctica detrás de un volante para ser exitoso en la conducción de un vehículo. Cuanto más pruebas tengas en situaciones reales, mejor te sentirás al volante. Un detalle a tener muy en cuenta es que el entrenamiento debe ser gradual.
Es decir, comenzar el entrenamiento con situaciones sencillas y luego ir manejando situaciones cada vez más difíciles.
Es muy importante también mantenerse frío en situaciones extremas. En situaciones de emergencia, no puedes permitir que te afecte una pataleta de nervios. Por encima de todo, la calma y la velocidad de pensamiento juegan un papel muy importante en situaciones de mucha presión y en situaciones donde hay otros vehículos involucrados.