Aunque tener plaza de garaje facilite mucho la vida, ahorrándonos un valioso tiempo cada vez que llegamos a casa con el coche, no siempre resulta tan cómodo. Por ejemplo, a la hora de entrar y salir del garaje pueden darse ciertas situaciones comprometidas, como encontrarte otro coche bloqueando el camino cuando tú ya estabas encarando la cuesta de salida.
Dependiendo del tamaño del garaje, tendrás que hacer más o menos malabarismos para aparcar y desaparcar en tu plaza. Si tienes suerte y tu garaje es amplio, encontrarte algo de tráfico no te generará problemas, pero si tu garaje es muy estrecho hay ciertas situaciones que pueden resultar muy frustrantes. Si tu edificio no es de los que tienen vías de entrada y salida diferenciadas, conviene tener claro quién tiene la preferencia cuando dos coches traten de acceder o abandonar el aparcamiento al mismo tiempo.
2Quién tiene prioridad cuando el acceso está en pendiente
La situación descrita en el artículo anterior es una configuración de garaje muy habitual. Los garajes suelen estar en el sótano de los edificios, por lo que para acceder a ellos hay que bajar por una amplia rampa. Algunas rampas pueden tener un apartadero a mitad de camino, pero no suele ser habitual. También hay otros accesos que resultan hasta claustrofóbicos de lo pequeños que son.
Si tu garaje está en rampa y es tan estrecho que sólo cabe un coche tendrá preferencia el vehículo que circule en sentido ascendente, es decir el que está subiendo la cuesta. Si te percatas de que un vehículo está subiendo la cuesta del garaje, cuando tú quieres bajar, tendrás que esperar y apartarte para dejarle libre el paso. Por lo tanto, en la mayoría de garajes tendrá preferencia el que está saliendo, mientras que el que pretende entrar tendrá que apartarse. Pero no es la única situación, que se da de manera habitual en el garaje, y que también ha sido contemplada por el código.
