Controlar el consumo de combustible del coche es fundamental y no solo por cuestiones económicas y por el precio al que está la gasolina. Si no, porque es un indicativo de que algo en el automóvil no funciona de la manera correcta. De hecho, si se observa que el gasto ha aumentado y que es más elevado en relación con su empleo y las distancias que se recorren, es porque hay algún problema en la mecánica que hace que derroche de más.
Existen una serie de acciones que hacen que el rendimiento del combustible no sea óptimo. En esta nota te las contamos para que no cometas estos errores.
7Fugas y piezas en mal estado derrocha combustible
En resumen, este es una de las causas más habituales de por qué el vehículo gasta mucha gasolina. A veces, la fuga de un líquido puede ser imperceptible porque se va produciendo poco a poco y no se perciben, por ejemplo, manchas en el suelo cuando el coche está estacionado. O simplemente, el coche gasta de más, ya que hay algunas piezas que no funcionan bien (baterías, bujías, sensores de oxígeno, etc.).