En esta era de la tecnología, ya casi nadie sale de casa sin Google Maps o algún GPS para guiarnos en el camino. Nos permiten desplazarnos por lugares desconocidos sin preocupaciones, confiando plenamente en sus rutas sugeridas. Pero, en ocasiones, esas mismas maravillas tecnológicas nos meten en situaciones de lo más inesperadas ¡y casi cómicas! ¿Coches encajados en escaleras? ¿Camiones atrapados en curvas imposibles? No, el GPS no siempre es infalible…
3Una trampa para camiones en Navarra
En Etuláin, un pueblito navarro de apenas 27 habitantes, una curva en la calle San Esteban se ha convertido en el terror de los camioneros. ¿El culpable? El GPS, claro. Cada cierto tiempo, un camión queda atrapado al intentar hacer esa horquilla tan cerrada siguiendo las instrucciones del navegador. ¡Y es que no caben! La situación es tan recurrente que llevado a prohibir el paso a vehículos de más de 3,5 toneladas, para evitar futuros incidentes.
Pero, a pesar de las advertencias, algunos camioneros aún siguen confiando ciegamente en sus navegadores. El resultado: acabar bloqueado, afectando tanto a los residentes como a los propios conductores. La tecnología puede jugarnos malas pasadas cuando no se combina con la precaución necesaria.
