Cuando la incertidumbre económica y la necesidad de flexibilidad son el pan de cada día, la idea de comprar un coche en propiedad está perdiendo su atractivo. Según un reciente estudio de Northgate Renting Flexible, el 78,5% de los españoles no tiene intención de adquirir un coche a corto plazo. ¿El motivo? El alto costo de esta inversión y la aparición de opciones más grandes y adaptables a las necesidades cambiantes.
Sorprendentemente, solo el 6,7 % de los encuestados se plantea comprar un vehículo próximamente. La decisión de evitar la compra no responde únicamente a cuestiones económicas, sino también a un cambio en las prioridades de los consumidores, que buscan soluciones más prácticas y menos comprometidas.
2Los beneficios económicos de evitar la compra.
Tener un coche en propiedad no solo implica el gasto inicial de compra, sino también una larga lista de costos adicionales: mantenimiento, seguro, reparaciones, impuestos y la depreciación del valor del vehículo. En cambio, el renting flexible elimina gran parte de estos gastos y permite a los usuarios prever con exactitud cuánto destinarán mensualmente a su movilidad.
Este enfoque es especialmente relevante en un contexto donde el presupuesto familiar está cada vez más ajustado. Según Northgate, el renting flexible no solo es una solución económica, sino también una herramienta de planificación que reduce el estrés financiero asociado a los imprevistos.