Cabe recalcar, que un informe de la DGT, presentando hace algunos años, indicaba que el 70% de los conductores españoles utilizaban algún sistema tecnológico que lo alertase de un posible radar de velocidad en la carretera. Con la proliferación de los dispositivos móviles y las apps, este porcentaje ha aumentado. Aunque, actualmente, la gran mayoría desconoce la diferencia entre los avisadores, detectores e inhibidores.
A continuación, en el artículo te contaremos más detalles de estos artefactos cada vez más comunes en los coches.
4Avisadores de radar: legales
Asimismo, el caso más sencillo y sin novedades con la nueva Ley de tráfico son los avisadores de radar, ya que son la opción ciento por ciento legal. Estos son dispositivos que avisan de la ubicación de los radares basándose en información pública. Debemos destacar, que este artefacto funciona con señal GPS y se puede adquirir bien como un elemento físico o como una aplicación móvil. No precisan instalación, van ubicados en el salpicadero y cuestan entre 100 y 200 euros. Del mismo modo, los avisadores también detectan problemas en la carretera.