Puede que si nos dejamos llevar por el nombre no nos parezca para tanto este coche, ya que el Mercedes 190 corriente tampoco era una auténtica pasada, pero es que este no es un 190 cualquiera…
Mercedes-Benz transformó por primera vez el coche en una auténtica máquina deportiva con el lanzamiento del 190E 2.3-16 y el 2.5-16, unos modelos que contaban con una mayor potencia y distintos aspectos mejorados para su conducción. Más adelante, el fabricante alemán decidió competir en el DTM, por lo que construyeron el Evolution I y posteriormente el Evolution II, ya que necesitaban de ello para poder homologar el modelo de competición.
Motor AMG y una aerodinámica mejorada
En cuanto a lo que esconde bajo el capó esta unidad en concreto que se vende, tenemos un motor de cuatro cilindros en línea y 2,5 litros que cuenta con la ayuda de AMG para exprimirle 232 CV de potencia. Además, también de serie en el coche, se incluía una suspensión regulable y un kit de carrocería que añadía downforce al coche, o fuerza de empuje aerodinámica.
Y es que este ejemplar es el número 105 de los 500 que se hicieron, y fue entregado nuevo en Japón antes de que más adelante fuera comprado por sus actuales dueños en 2015. El coche tan solo ha hecho 10.030 km en toda su vida y en febrero de 2020 se envió a Mercedes-Benz Classic Center en California para ponerse a punto por completo.
Se espera sacar por él una cifra que esté entre los 225.000 y los 275.000 dólares, pero como en toda subasta, nunca se sabe…
