El juicio penal contra el exdirector ejecutivo y expresidente del grupo Volkswagen, Martin Winterkorn, por su papel en el conocido ‘dieselgate’, el escándalo de las emisiones de diésel de los vehículos de la firma germana arrancará en septiembre y se extenderá, según las previsiones de los magistrados, hasta septiembre de 2025
Asímismo, el proceso judicial, en el que se acusa a Winterkorn de fraude, falsas declaraciones y manipulación del mercado, durará más de un año, de acuerdo con el calendario publicado por el tribunal regional de Braunschweig, en la región occidental de Alemania.
Estas acusaciones se relacionan con el escándalo que sacudió al gigante automovilístico alemán después de que los reguladores de Estados Unidos descubrieran en 2015 que los vehículos diésel de Volkswagen habían sido programados, específicamente, para falsificar los resultados en las pruebas de emisiones de gases contaminantes, violando los estándares mediambientales de las autoridades estadounidenses.
Winterkorn, que había sido director ejecutivo de Volkswagen desde 2007, dimitió en septiembre de 2015 en medio de todas las acusaciones, y aunque el juicio estaba previsto que empezara en 2021, se retrasó por los problemas de salud del empresario.
El juicio que podría dar carpetazo al ‘dieselgate’
«Considero que estas acusaciones son infundadas», dijo en su momento Winterkorn sobre los cargos de los que se lo acusaba.
Además, durante su primera declaración ante el juzgado, Winterkorn dijo que se enteró de los problemas con las autoridades estadounidenses «muy tarde» e «inicialmente de manera incompleta».
«Si me hubieran dado una imagen completa de los procesos internos en los departamentos especializados responsables, no habría dudado en abordar los problemas directamente y aclararlos», comentó.
En España, los afectados por el caso ‘dieselgate’ rondan los 630.000, entre propietarios de vehículos de la marca Volkswagen, Seat, Audi y Skoda.
El grupo de inversión Deka Investment, principal demandante personado en la causa, también acusó a Porsche SE, el principal accionista del grupo alemán, de las pérdidas de valor en bolsa.
