Era cuestión de tiempo que la firma del Cavallino Rampante presentara el digno sucesor del exitoso Ferrari 458 Challenge y que como no podía ser de otra manera iba a tomar como punto de partida el actual Ferrari 488 GTB, una máquina que estrenaba el propulsor 3.9 V8 Biturbo, un corazón galardonado con el premio de Motor del Año 2016 y que es capaz de generar la friolera de 670 CV de potencia.
Este radical Ferrari 488 Challenge es una versión ideada exclusivamente para ser utilizada dentro de los circuitos de todo el mundo y capaz de competir en diferentes disciplinas internacionales de la FIA, como los Campeonatos GT, Grand-Am, IMSA, Campeonato de Resistencia e incluso las 24 Horas de Le Mans.
Un motor adaptado a la competición
Como ya hemos dicho, deriva de la versión de calle y por ese mismo motivo mantiene el mencionado corazón 3.9 V8 Biturbo, que en esta versión Challenge también eroga 670 CV de potencia. Ahora bien, los chicos de Maranello lo han adaptado a las exigencias de la competición y presenta una cartografía específica, con diferentes mapas dependiendo de los gustos del piloto. También se emplean materiales como el magnesio o el titanio en su tren motriz para intentar rebajar al máximo el peso de esta criatura, que sigue contando con los servicios del cambio automático F1 DCT. Ahora bien esta transmisión de doble embrague tiene unos desarrollos específicos y una puesta a punto muy especial.
Estos Ferrari 488 Challenge estrenan por vez primera el sistema SSC de ayuda a la conducción, que integra los controles de tracción y el sistema E-Diff. Gracias a ello se mejora el paso por curva y se adelanta el momento de aceleración a la salida de las mismas. Ahora bien, para que el piloto pueda adaptarlo a su gusto, todo se controla de forma independiente y se han instalado tres manettino en el volante en vez de uno como sucede en los Ferrari 488 GTB. Uno controla el reparto de la frenada, otro el control de tracción y el último controla el diferencial trasero electrónico.
El resultado de todo esto es que este Ferrari 488 Challenge tiene un paso por curva un 11,6% más rápido en el trazado italiano de Monza.
Una aerodinámica especial
La aerodinámica ha jugado un papel vital en su desarrollo y por ese mismo motivo se ha colaborado con el Centro Style Ferrari. La posición del radiador delantero se ha revisado para mejorar el trabajo de refrigeración y poder instalar los nuevos apéndices aerodinámicos. Delante aparece un nuevo splitter, nuevos alas laterales, un nuevo capó con tomas de refrigeración extra… También en su zaga encontramos un difusor más prominente así como un ala trasero de grandes dimensiones, que mejora la carga aerodinámica un 7% si se compara con el Ferrari 458 Challenge EVO.
En el habitáculo se ha mantenido lo indispensable y se intala asiento de competición, arneses de seguridad, jaula interior… Con todo ello se reduce al máximo su peso y para esto también se instalan unas ligeras llantas monotuerca forjadas y con neumáticos Pirelli, tras las que se esconde un potente equipo de frenos Brembo con discos carbocerámicos.
Semejante criatura de competición es capaz de girar en el trazado de pruebas de Fiorano en sólo 1 minuto y 15,5 segundos, un segundo más rápido que su antecesor.