Ferrari enfrenta un problema persistente con la proliferación de falsificaciones y modificaciones no autorizadas de sus productos. En su lucha contra estas infracciones, la empresa ha intensificado sus esfuerzos para erradicar las imitaciones. Recientemente, la firma italiana publicó datos que revelan la magnitud de sus esfuerzos: más de 400.000 productos falsificados fueron destruidos el año pasado, incluyendo tres coches que imitaban el famoso Cavallino Rampante.
El año pasado, como parte de una campaña más amplia contra las falsificaciones, destruyó tres vehículos falsos. Estas acciones subrayan el compromiso de la empresa de proteger su marca y garantizar que solo los productos auténticos lleven su prestigioso logotipo. La destrucción de estos coches no es solo simbólica, sino que también sirve como advertencia para aquellos que intentan comercializar o poseer réplicas no autorizadas.
La lucha de Ferrari contra las falsificaciones
Además de los coches, Ferrari también ha dirigido su atención a una amplia gama de productos falsificados. La empresa destruyó más de 100.000 prendas de vestir, 91.000 gafas y casi 61.000 relojes de pulsera. Estos artículos representan solo una fracción del total de productos falsos identificados y eliminados. Las carteras también fueron un blanco frecuente, con más de 57.000 unidades destruidas.
La lista de productos destruidos no se detiene ahí. La firma italiana también eliminó más de 30.000 botellas de perfume, 17.000 bolsos, otros 17.000 pares de zapatos y más de 13.000 cinturones. Entre los artículos más inusuales se encontraban casi 1.100 pelotas, 900 modelos a escala y 800 scooters falsos. En una nota curiosa, un refrigerador con el logotipo del Cavallino Rampante también fue descubierto y destruido.
Campaña de recompensas de Ferrari contra las falsificaciones
Para involucrar al público en su lucha contra las falsificaciones, Ferrari lanzó el año pasado un proyecto de recompensas. Los participantes que ayuden a la empresa a identificar productos falsificados pueden recibir un «agradecimiento oficial» y un «dispositivo de la marca de regalo». Esta iniciativa ha sido un gran éxito, con informes llegando a diario, lo que subraya la colaboración del público en la defensa de la autenticidad de la marca.
Hace unos años, la firma italiana permitió la creación de siete réplicas de coches para una película sobre la vida de Enzo Ferrari. Aunque estos coches, que imitaban a los corredores de 1957, fueron construidos meticulosamente por 20 restauradores expertos, el dueño ordenó que fueran desmantelados después del rodaje. La empresa llevó a cabo una «destrucción metódica de la carrocería de fibra de vidrio» para asegurar que estas copias no pudieran ser utilizadas de manera inapropiada.
