Ya está aquí el Ferrari Purosangue, el SUV de la marca de Maranello. Ha tardado en llegar, cuando sus rivales ya hace tiempo que sucumbieron a la moda SUV. Porsche con el Cayenne, Lamborghini con el Urus, Bentley con el Bentayga, Aston Martin con el DBX, Maserati con el Levante o Rolls con el Cullinan. Las principales marcas de lujo y deportivas tienen uno o más modelos en su portfolio.
1El turno de Ferrari
Se ha hecho de rogar, pero el lanzamiento del Ferrari Purosangue ya es oficial. Se venía especulando sobre sus especificaciones y diseño. De hecho hemos visto unos cuantos bocetos de ilustradores que apostaban por diferentes fórmulas sobre cómo sería el SUV de Ferrari.
Pero este tiempo ya ha pasado y el Ferrari Purosangue ya se ha mostrado al mundo por dentro y por fuera. La espera ha merecido la pena. Muestra un diseño digno de la marca, con formas musculosas que recuerdan al Ferrari Roma. Sobre todo en su parte posterior.
75 años ha tardado Ferrari en crear su primer modelo de cuatro puertas de producción. Aunque sus anchos pasos de rueda traseros y su angulosos pilar C enmascaran las puertas traseras, que se abren en compás, hacia atrás. Pero mantienen el pilar central para mantener la máxima rigidez de la carrocería.
Un SUV, o más bien un crossover –esa frontera siempre la marcan los propios fabricantes al dictado de sus departamentos de marketing–, de 4,98 metros de longitud. Su elevada cintura que se curva en la parte posterior se parece unirse sobre los faros traseros con difusor, que alberga las cuatro salidas de escape. Los inusuales embellecedor de los pasos de rueda «flotantes» nos da una visión diferente de las extensiones de los mismos. Y hace que incluso las llantas delanteras de 22 pulgadas y las traseras de 23 pulgadas no parezcan demasiado grandes.