La obstrucción de los filtros del coche puede, no solo afectar la calidad del aire interior, sino también comprometer la atención del conductor, aumentando así el riesgo de accidentes.
Con la llegada de la primavera, el despertar de la naturaleza trae consigo una preocupación adicional para los conductores: el aumento de los niveles de polen. En este contexto, los filtros de habitáculo de los vehículos emergen como un componente esencial, especialmente los modelos antialérgicos, que no solo garantizan el confort del habitáculo, sino que también desempeñan un papel crucial en la seguridad y la salud de los ocupantes.
Exploraremos la importancia de los filtros de habitáculo, en particular los antialérgicos, destacando su función vital en la purificación del aire y la prevención de reacciones alérgicas, en un momento en que los niveles de polen están en su punto más alto.
2Las consecuencias de un estornudo
La seguridad en la conducción también se ve amenazada por la presencia de polen en el habitáculo. Según señala la compañía alemana, las dificultades respiratorias y los estornudos inducidos por el polen pueden reducir drásticamente la atención del conductor, aumentando así el riesgo de accidentes. Sorprendentemente, un estornudo a 80 kilómetros por hora puede resultar en una pérdida de visibilidad de hasta 45 metros, resaltando la importancia de mantener los filtros de habitáculo en óptimas condiciones, especialmente en entornos urbanos y zonas industriales, donde los niveles de polen pueden ser especialmente altos.
Pero la importancia de los filtros de habitáculo va más allá de la comodidad y la seguridad. MANN+HUMMEL subraya su papel en la prolongación de la vida útil del sistema de aire acondicionado del vehículo, al prevenir la acumulación de depósitos en sus delicadas estructuras. Con el tiempo, la obstrucción gradual del núcleo del filtro puede reducir significativamente la capacidad del ventilador, lo que a su vez aumenta el consumo de combustible y el desgaste del sistema.