La dirección de Ford ha acordado con el sindicato UGT la presentación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo para la fábrica de Almussafes (Valencia). Se trata de un ERTE por causa de fuerza mayor, que tendrá efectos retroactivos para los trabajadores de la planta valenciana desde el pasado 29 de octubre, el día en que la DANA arrasó Valencia, y se extenderá como máximo hasta el próximo 30 de noviembre.
Según UGT, la dirección de Ford se ha comprometido a complementar todos los salarios al 100% mientras este ERTE esté en vigor. Se trata de un expediente que podrá desactivarse en cualquier momento antes del 30 de noviembre y, cuando esto suceda, la fábrica volverá al ERTE que ya había pactado hasta el 31 de diciembre de este año, en el que los trabajadores reciben un 85% de su salario.
Los proveedores de Ford se han visto afectados por la DANA
Ford fabrica en Almussafes en la actualidad el modelo Kuga y, aunque las instalaciones de la factoría no se han visto afectadas gravemente por la DANA, las inundaciones sí han llegado al parque de proveedores cercano, donde hay empresas que suministran componentes críticos a la planta valenciana de Ford. A esto se suman las infraestructuras que han resultado afectadas, que bloquean la llegada de componentes y de los propios trabajadores hasta la planta.
En principio, tras una primera evaluación de la situación, estaba previsto que la actividad en la factoría de Ford en Valencia se reanudara el lunes 11 de noviembre, pero parece que no va a ser posible cumplir esta fecha. La planta de Ford es un pilar fundamental para la zona, ya que son muchos los trabajadores y empresas que dependen directa o indirectamente de ella.
Decenas de millones de euros en pérdidas
Y es que AVIA, el clúster de automoción de la Comunidad Valenciana, que representa a numerosas empresas del sector del automóvil en este territorio, estima en «decenas de millones de euros» las pérdidas provocadas por la DANA en las empresas basándose en una primera evaluación realizada entre las compañías situadas en polígonos industriales como los de Ribarroja, Massanassa, Albal, Alfafar, Picanya o Silla.
Según AVIA, hay daños que abarcan desde instalaciones completamente inundadas e inoperativas y daños estructurales, hasta desperfectos en vallados, accesos, vehículos industriales y particulares, mobiliario, tabiquería, solera, desagües, equipamiento, materia prima, maquinaria, stock, equipos informáticos, servidores, robots, entre otros activos.
La directora de AVIA, Jackie Sánchez-Molero, ha explicado que «las empresas afectadas nos han comunicado que, debido a la magnitud de los daños, les resulta imposible estimar con precisión cuándo podrán retomar su actividad«.
40 concesionarios afectados
Faconauto, la asociación que engloba a los concesionarios españoles, ya ha estimado en 490 millones de euros las pérdidas económicas provocadas por la DANA. La entidad precisa que las graves inundaciones han afectado a unos 40 concesionarios en la Comunidad Valenciana y que hay unos 18.000 turismos en stock que han resultado dañados, por lo que la pérdida en este apartado sería de unos 430 millones de euros.
Esta cifra se sumaría a la de los vehículos industriales, un segmento en el que el impacto ha sido igualmente significativo, con unos 500 vehículos afectados y pérdidas estimadas en 60 millones de euros.