Todos los conductores hemos tenido un día en el que estamos apurados o distraídos y cometemos un error al repostar en la gasolinera. Echar gasolina en un coche diésel o diésel en un coche de gasolina es un error común pero costoso. Ambos tipos de carburantes son muy diferentes, y un error en la elección puede tener consecuencias graves para el motor de tu coche y para tu bolsillo. En este artículo, exploraremos en detalle qué debes hacer si te equivocas al repostar, las diferencias clave entre gasolina y diésel, las consecuencias para tu motor y el costo potencial de las reparaciones.
3Consecuencias de echar diésel en un coche de gasolina
El error inverso, echar diésel en un coche de gasolina, también tiene graves implicaciones:
Daño al motor de gasolina: El diésel no se quema tan fácilmente como la gasolina en un motor de gasolina. Esto puede resultar en problemas de encendido, pérdida de potencia y daño al motor.
Limpieza del sistema: La limpieza del sistema es necesaria para eliminar el diésel del tanque y del sistema de inyección de gasolina. Esto puede ser costoso y complicado.
Daño a la sonda lambda y catalizador: El diésel puede dañar la sonda lambda y el catalizador de un motor de gasolina, lo que puede requerir su reemplazo.
Costo de reparación: Las reparaciones en un motor de gasolina después de echar diésel pueden variar en coste, pero también pueden llegar a ser significativas. El reemplazo de componentes dañados y la limpieza del sistema pueden resultar en facturas considerables.