Hablar de Gasolineras Low Cost, es hablar de las sucesivas crisis energéticas. Desde la epidemia del Covid, y después, por la guerra de Ucrania, el incremento de los precios de los combustibles, han propiciado el aumento de estaciones de servicio Low Cost.
Las dudas en cuanto a la calidad del producto, los perjuicios que afectan a la mecánica de los coches de aquellos que repostan este tipo de gasolina y la forma en que rentabilizan el sector, poniendo en entredicho la calidad del servicio, e incluso las condiciones de trabajo de los empleados, siguen siendo una constante critica.
Hoy remarcamos el ejemplo de una marca en el sector Low Cost, donde cuidan el mercado laboral y garantizan las condiciones de trabajo a los empleados en su movimiento expansivo por el territorio nacional.
3Los detractores del sector
Sin embargo, las estaciones de servicio Low Cost también tienen sus detractores, que cuestionan su calidad, su seguridad y su impacto social y ambiental. Algunas asociaciones de consumidores advierten de que estos combustibles pueden ser de peor calidad que los de las estaciones tradicionales, y que pueden dañar el motor de los vehículos o aumentar el consumo y las emisiones.
Asimismo, algunos sindicatos denuncian que estas estaciones precarizan el empleo, al reducir el número de trabajadores y sus condiciones laborales. Por último, algunos expertos alertan de que estas estaciones fomentan el uso del coche y el consumo de combustibles fósiles, lo que va en contra de la transición ecológica y la lucha contra el cambio climático.