El mundo de las gasolineras está cambiando rápidamente. El auge de las ‘low cost’ está empezando a suponer una amenaza para las grandes marcas tradicionales, como Repsol, Cepsa, Galp o BP. Con sus precios competitivos, estas nuevas alternativas están atrayendo cada vez más conductores que buscan ahorrar sin renunciar a la calidad del combustible. La tendencia hacia lo económico gana terreno. En este artículo, te contamos por qué las ‘low cost’ podrían significar el fin de las grandes petroleras.
2Fidelidad y confianza en el bajo coste
Una de las sorpresas más reveladoras del estudio es la lealtad de los conductores hacia las gasolineras ‘low cost’. Cerca del 80% de los interrogados afirma que repostan siempre en la misma estación. Este dato puede llegar a preocupar a las grandes marcas como Repsol y Cepsa, que durante años han mantenido una cartera leal de clientes.
Esta fidelidad destaca especialmente en comunidades autónomas como Cantabria, Aragón y La Rioja. En estas regiones, los conductores se muestran confiados en que las gasolineras ‘low cost’ no solo ofrecen combustible más barato, sino también de una calidad similar al de las grandes compañías. En Baleares, Cataluña y Extremadura, la confianza en las estaciones de bajo coste ha aumentado un 4,5% en el último año, indicando una creciente aceptación en el país.