La batalla comercial que las gasolineras Low Cost vienen manteniendo con las grandes distribuidoras de combustible como Repsol, BP o Cepsa, arroja un saldo favorable hacia las primeras, a pesar de lo que supone para ellas la asfixiante crisis energética.
Una apuesta seria por la ampliación de infraestructuras, según la AESAE, es la razón del crecimiento, en contra de los pronósticos fruto de las políticas de Pedro Sanchez y del descaro en las bonificaciones por parte de las grandes compañías.
4La respuesta de las grandes compañías
Lejos de ser estratégica apunta mas al incentivo para conseguir, no ya mas clientes sino, fidelizar los disponibles. De hecho la nuevas incorporaciones o aperturas de establecimientos nuevos en Repsol ha sido nula, mas bien al contrario ha perdido posiciones y ubicaciones. Su homónima Cepsa tan solo ha inaugurado 8 estaciones de servicio.
Por contra ambas compañías han reanudado sendas campañas en sus programas comerciales, especialmente Repsol, desde los que la contratación de otros productos bajo la misma titularidad, redunda en beneficios del precio de adquisición del combustible.
Sin embargo, a fecha de 22 de marzo, el litro de gasolina Repsol se sitúa en los 1,67 euros de media mientras que en una Ballenoil el panel se quedaba en los 1,55 euros, aproximadamente.