Los excesos de velocidad, el uso del teléfono móvil al volante y el consumo de alcohol son las tres principales infracciones que la Dirección General de Tráfico (DGT) prioriza en su lucha por la seguridad vial. En respuesta a estos problemas, la DGT ha endurecido las sanciones a los conductores y aumentado la vigilancia en las carreteras. Sin embargo, hay otras infracciones menos conocidas que también pueden resultar en multas significativas, como el uso de dispositivos para eludir la detección de radares.
2La detección y el uso de detectores de radar
Un caso reciente en el País Vasco ilustra cómo las autoridades están abordando el uso de dispositivos para eludir la detección de radares. Un conductor de un Audi A6 fue detenido por la Ertzaintza, que descubrió un detector de radar en su vehículo. Estos dispositivos captan las ondas de radio emitidas por los radares, permitiendo al conductor saber cuándo se está acercando a un radar y reducir la velocidad para evitar una multa.
El uso de detectores de radar puede considerarse parte de una «guerra electrónica» entre los conductores y las autoridades de tráfico. Estos dispositivos no solo alertan al conductor sobre la presencia de un radar, sino que también pueden interferir con las ondas emitidas por los radares, haciendo que el vehículo sea «invisible» para los sistemas de vigilancia del tráfico. Esto permite a los conductores circular a cualquier velocidad sin ser detectados.