Destruir el chasis del coche parece una expresión gruesa, demasiado contundente y alejada de lo que queremos hacerle a nuestro adorado vehículo… pero en realidad es lo que, en la práctica, puede ocurrir a menudo por malas prácticas que en muchos casos hacemos de la forma más inconsciente. Los daños en el chasis pueden llegar con bastante facilidad, de hecho.
Si hablamos de hábitos, no ser consciente de que el clima suele ser nuestro peor enemigo o que la amada naturaleza nos la puede jugar es sinónimo de no querer demasiado a nuestro coche. Lo podrás comprobar fácilmente a continuación.
3Destrozar el chasis con hábitos perjudiciales: menospreciar la sal
En invierno es habitual que las carreteras sean rociadas con sal para evitar las heladas. ¿. Con el paso de los coches, este salta y llenará nuestro vehículo de restos del mismo. En cualquier otro caso podría dar igual, pero en este hablamos de un elemento muy corrosivo que puede dañar tremendamente el chasis. Si te ha tocado circular en estas circunstancias, no tardes en lavar a fondo el coche.