El Auto Union Type 52 es el clásico más juvenil de todos los coches que se dieron cita este año en Goodwood y es un Audi por el que se tardaron casi 100 años en fabricarlo. Y, probablemente, de los que se han dado cita en toda su historia. La creación de este vehículo tiene sus raíces en la década de 1930, cuando Audi, DKW, Horch y Wanderer se unieron para formar Auto Union AG en 1932. Esta nueva compañía, consciente del escaparate que representaba la competición, decidió involucrarse en el deporte motor desde sus inicios.
En 1933, seleccionaron a Ferdinand Porsche para desarrollar sus coches de carreras. De esta colaboración nació el Auto Union Type A, conocido como Type 22 para Porsche, que junto a Mercedes popularizaron la leyenda de las «flechas plateadas», dominando las competiciones. Sin embargo, paralelamente a los Grandes Premios, también se disputaban carreras de resistencia, lo que llevó a Auto Union AG a encargar a Porsche el desarrollo del Auto Union Type 52.
El proyecto inacabado de Audi
El Auto Union Type 52, conocido como Schnellsportwagen (deportivo de altas prestaciones en alemán), fue concebido como un vehículo que pudiera ser homologado para la calle y participar en carreras de resistencia como la Mille Miglia o Le Mans. En 1934, el proyecto comenzó a tomar forma, pero nunca llegó a producirse debido a diversos retrasos y finalmente se abandonó en 1935. Sin embargo, el legado de este vehículo nunca se olvidó.
En 2023, Audi decidió rendir homenaje a este proyecto inacabado. La compañía encargó a Crosthwaite & Gardner, especialistas en la restauración de vehículos, que materializaran el Auto Union Type 52. Este desafío, que requirió «años de trabajo» según Audi, culminó en la construcción de un coche que combinaba el diseño y las especificaciones técnicas de los años 30 con las tecnologías modernas.
¿Qué característica tiene este coche homenajeado por Audi?
Partiendo de los planos y datos técnicos que Audi todavía conservaba, los expertos trabajaron para dar vida a un coche de más de cinco metros de largo, diseñado para mejorar la aerodinámica y el rendimiento. Además, mantuvieron la idea original de ofrecer un coche apto para la conducción diaria, equipado con faros, techo y un maletero con dos ruedas de repuesto.
El Auto Union Type 52 cuenta con un motor de 16 cilindros y una cilindrada de 4,4 litros, capaz de producir 200 CV de potencia con un par motor máximo de 436 Nm, alcanzable a las 2.350 rpm. A pesar de la suavización de algunas especificaciones originales, como la reducción de la compresión del motor y la relación de transmisión del sobrealimentador Roots, el coche es capaz de alcanzar los 200 km/h.
