Hyundai da los últimos toques a i30 N, la versión deportiva del compacto coreano. Un modelo que, junto al recién mostrado wagon y el futuro fastbackse unirá al cinco puertas para formar una familia de compactos con muchos argumentos. Entre ellos, sin duda, el de la deportividad, pues la marca coreana está desarrollando con mimo esta versión, en la que, por ejemplo, ha puesto su granito de arena en la puesta a punto Thierry Neuville, el piloto de rallys de la marca coreana.
Neuville ya mostró su satisfacción por el comportamiento dinámico del coche, uno de los aspectos prioritarios en el desarrollo del modelo. No en vano, Albert Biermann, responsable del departamento N, que agrupará los modelos más deportivos de la marca (antes fue responsable de la división M de BMW), ha anunciado que este i30 N no será el más potente de su clase, pero el objetivo es que sea el más divertido de conducir.
Entre 250 y 275 caballos
Para ello, en Hyundai han desarrollado un chasis más rígido, han modificado suspensiones, han añadido unos frenos más grandes y han trabajado en un cambio de marchas más rápido y preciso, un cambio que en principio parece que será una transmisión manual de 6 velocidades, aunque más adelante podría llegar una transmisión automática de doble embrague.
En cuanto a la potencia se situará entre los 250 y los 275 caballos provenientes de un motor dos litros turbo con cuatro cilindros en línea. Y habrá una versión 'normal con esos 250 caballos o una con Pack Performance, enfocada para circuitos que alcanzaría alrededor de 275 caballos. Con esa potencia, y un sonido que nuestros colegas de CarPix han definido como mejor que el del Volkswagen Golf GTI, el Hyundai i30 N tendrá que dar la batalla al mencionado Golf, al Renault Mégane RS, al Honda Civic Type R, al Seat León Cupra, el Peugeot 308 GTI, el Alfa Giulietta Veloce o al Ford Focus RS.
Estamos impacientes…