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Impuesto de circulación: ¿Cómo y dónde se paga?

El Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), conocido comúnmente como el «impuesto de circulación» o el «numerito», es uno de esos pagos inevitables para los propietarios de vehículos en España. Si bien este tributo tiene la finalidad de contribuir al mantenimiento de infraestructuras y servicios locales, muchos conductores desconocen todos los detalles que lo rodean. A continuación, te explicamos cómo y dónde se paga, así como algunos aspectos clave que conviene conocer.

El IVTM es un tributo que deben abonar todos los propietarios de vehículos que circulan por las vías públicas. Su principal objetivo es recaudar fondos para los ayuntamientos, quienes destinan este dinero a la mejora de las infraestructuras y los servicios municipales. A pesar de que su nombre podría llevar a pensar que solo se paga por circular, la realidad es que es un impuesto anual que se paga independientemente de si el vehículo se utiliza o no.

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¿Quién paga el Impuesto de Circulación en una compraventa?

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En una operación de compraventa de un vehículo de segunda mano, el IVTM se paga por el titular del vehículo a fecha 1 de enero de cada año natural. Esto significa que si compras un coche en el mes de junio, por ejemplo, el impuesto de circulación correspondiente al año en curso lo habrá pagado el vendedor, siempre y cuando no haya cambiado el titular antes del 1 de enero.

Este aspecto es importante porque, aunque la compraventa de un vehículo implica el traspaso de la propiedad, el responsable del pago del IVTM sigue siendo quien estaba registrado como titular a principios de año.

El Impuesto de Circulación es un tributo anual que todos los propietarios de vehículos en España deben abonar. Aunque el período de pago varía según el municipio, lo cierto es que es un gasto recurrente e inevitable para quienes tienen coche. Además, existen bonificaciones y exenciones dependiendo del tipo de vehículo, lo que puede reducir significativamente el coste del impuesto. Es esencial estar al tanto de los plazos y formas de pago, así como de las variaciones que pueden existir entre municipios, para evitar sorpresas desagradables a la hora de abonar este impuesto.

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