Todos sentimos esa cruda sensación constantemente de que somos permanentemente atracados porque nos fríen a impuestos por todos lados. Incluso, muchos de ellos nos los cobran por duplicado. Sucesiones, IBI, IVA, Impuesto de Matriculación… Tener un coche sale muy caro, es evidente.
Pero hay un gasto del que cada día se habla más… y no es otro que el combustible. Como no podía ser de otra manera, este también contiene sus correspondientes impuestos que nos dejan literalmente tiesos. Y es que el precio de los carburantes tiene un porcentaje muy elevado de impuestos de todo tipo, algunos un tanto surrealistas.
3Precio base del combustible (sin ningún impuesto)
El precio base del carburante varía según la cotización internacional de la gasolina y el gasóleo en los mercados al por mayor de referencia. El tipo de cambio euro/dólar también es un factor significativo porque representa más o menos el 33% del PVP en la gasolina y el 39% en el gasóleo A.
Costes como la producción, distribución y comercialización apenas varían. Su relevancia es menor. Lo más importante son las variaciones a causa del mantenimiento de las reservas estratégicas o la aportación al Fondo Nacional de Eficiencia Energética… El margen bruto de distribución de la gasolina supone el 17% del PVP, aunque en el caso particular del diésel ronda el 15%.
