IMSA es un preparador con sede en Alemania que está especializado sobre todo en modificar cualquier máquina desarrollada por Mercedes-AMG, como puede ser el caso de última criatura, que responde al nombre de IMSA RXR (Road X-tra Racing) One Super GT.
Para crear este bólido que parece sacado directamente de los circuitos, pero que se puede utilizar en el día a día, IMSA ha tomado como punto de partida un Mercedes-AMG GT S, un deportivo que según sale de los cuarteles generales de Affalterbach es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 310 km/h.
De 522 a 860 CV de potencia
Pero debe ser que eso no es suficiente para algún que otro caprichoso cliente y en ellos han pensado estos chicos, que para comenzar desmontaron pieza a pieza su 4.0 V8 Biturbo, un corazón al que han instalado bielas y pistones forjados, dos nuevos turbocompresores, nuevo sistema de admisión, un intercooler de mayores dimensiones… Gracias a estos retoques y a algunos otros, este propulsor pasa de 522 a 860 CV de potencia, de igual manera que su par motor escala de 670 a 1.000 Nm.
IMSA quiso asegurar la durabilidad de su caja de cambios automática de doble embrague y siete velocidades, por lo que han tenido que reforzar sus componentes internos para digerir su extra de potencia. La suspensión también ha sido revisada por completo y se ha equipado con frenos carbocerámicos.
Para incrementar la seguridad de sus ocupantes y para aumentar la rigidez estructural, IMSA lo equipa con una jaula interior.
300 kilos más ligero
Aquí no acaba la cosa, ni mucho menos, porque elementos como los paragolpes, el capó delantero, el techo, las aletas delanteras, la tapa del maletero o el alerón posterior han sido fabricados en carbono, por lo que su peso se ha reducido en unos 300 kilos, de forma que se rebajan considerablemente los 1.645 kilos originales y también se mejora la aerodinámica de esta criatura tan radical.
Rematan la jugada un nuevo conjunto de llantas forjadas, que son de 20 pulgadas delante y 21 pulgadas detrás, y que vienen equipadas con neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R en medida 305/30 R20 y 315/30 R21 respectivamente.
IMSA ha confirmado que sólo fabricará una corta serie de este RXR One Super GT, y que cada unidad podrá ser personalizada por el cliente a su gusto, pero seguro que no va a ser nada barato.
