La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es un proceso crucial para asegurar que los coches en circulación cumplen con las normativas de seguridad y emisiones. Los inspectores de la ITV tienen una perspectiva única sobre la fiabilidad y el rendimiento de los vehículos, ya que examinan decenas de coches cada día que pasa.
Con esta vasta experiencia, se convierten en una fuente más que invaluable de información sobre los problemas comunes y las trampas que se encuentran en el mundo automotriz.
4La importancia de la evolución del modelo
Los problemas mecánicos y de rendimiento en los vehículos recién lanzados no son infrecuentes. Las marcas suelen identificar y corregir estos defectos en versiones posteriores, mejorando la fiabilidad y el rendimiento. Sin embargo, los propietarios de los primeros modelos pueden encontrarse lidiando con averías y problemas que no esperaban.
En el caso del Audi Q5 2.0 TFSi, estos problemas mecánicos se han traducido en una mala reputación para esa configuración específica. A pesar de las mejoras en las versiones posteriores, la experiencia negativa con los primeros modelos puede hacer que algunos conductores y expertos, como los inspectores de la ITV, se muestren reacios a recomendar estos coches.
