comscore
miércoles, 15 enero 2025

Alucina con el número de motocicletas y scooters que pasan la ITV a la primera

La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) se ha convertido en un pilar fundamental para garantizar la seguridad vial en España, especialmente en el caso de motocicletas y ciclomotores. Desde su implementación obligatoria, este proceso ha transformado la forma en que estos vehículos se mantienen y circulan por nuestras carreteras. La ITV no solo es un trámite necesario, sino una auténtica salvaguarda que ayuda a reducir la siniestralidad y asegura que las motos que surcan las calles estén en condiciones óptimas.

La obligatoriedad de la ITV para motocicletas se instauró a mediados de la década de 1980, y en 2006 se extendió también a los ciclomotores. Este paso fue clave para mejorar la seguridad en las vías, reduciendo el número de accidentes y asegurando que estos vehículos, que a menudo son más vulnerables en caso de colisión, cumplan con estándares rigurosos de seguridad. Desde la inclusión de los ciclomotores en esta normativa, la siniestralidad ha caído en picado. Los datos hablan por sí solos: un impresionante 88% de reducción en las muertes asociadas a ciclomotores entre 2006 y 2022, pasando de 308 a solo 36 víctimas.

3
La periodicidad de la ITV: un calendario a seguir

ITV motos y ciclomotores Motor16

No todas las motocicletas y ciclomotores deben pasar la ITV con la misma frecuencia. Para las motocicletas, la primera ITV debe realizarse a los cuatro años de su matriculación y, posteriormente, cada dos años. En el caso de los ciclomotores, la primera inspección se realiza a los tres años, y después también cada dos años.

Este calendario es esencial para mantener los vehículos en buen estado y evitar sorpresas desagradables en la carretera. Es un recordatorio constante de que la seguridad vial no es algo que pueda tomarse a la ligera; requiere mantenimiento, previsión y una actitud responsable por parte de todos los conductores.