Aunque muchos conductores no lo sepan, estos vehículos de cuatro ruedas robustos y versátiles que a menudo asociamos con caminos polvorientos o terrenos accidentados, también están obligados a pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Estos vehículos, diseñados inicialmente para el campo y zonas montañosas, han comenzado a ganar presencia en entornos urbanos, pero como cualquier otro vehículo homologado y matriculado, deben cumplir con las normativas de seguridad vigentes.
Conocidos por su capacidad para moverse con facilidad sobre terrenos complicados, presentan ciertas peculiaridades en su conducción. A diferencia de los coches convencionales, que utilizan un volante, cuentan con un manillar, lo que hace más similar a las motocicletas en términos de manejo. Esta característica, sumada a su menor estabilidad en comparación con vehículos de cuatro ruedas tradicionales, los convierte en una opción divertida, pero potencialmente peligrosa si no se conduce con precaución. Debido a estos riesgos, la seguridad en su funcionamiento es primordial, y aquí es donde entra en juego la ITV.
3Precisión en el examen técnico
Uno de los aspectos más delicados de la inspección es la verificación de las emisiones y el ruido. Aunque el quad sea un vehículo más pequeño y de uso recreativo, está sujeto a las mismas regulaciones que los coches en cuanto a contaminación. El sistema de escape debe cumplir con los límites de emisiones establecidos, y el nivel de ruido del quad no puede exceder los decibelios permitidos.
El sistema de frenado también es objeto de especial atención. Se utiliza un frenómetro o un desacelerador para evaluar la respuesta de los frenos en distintas condiciones de conducción. En un vehículo con las características de un quad, donde la estabilidad es crucial, un sistema de frenos defectuoso puede convertirse rápidamente en un riesgo grave.
Finalmente, se examinan los componentes relacionados con la estabilidad del quad: la dirección, los ejes, las ruedas y la suspensión. Estos elementos son fundamentales para garantizar que el quad pueda maniobrar de manera segura, tanto en terrenos irregulares como en carreteras pavimentadas. Los inspectores emplean una placa detectora de holguras para identificar cualquier fallo en la suspensión, los neumáticos o las rótulas de dirección.