Jeep ha seguido casi al pie de la letra la receta del Jeep Gran Cherokee L norteamericano para dar forma al Jeep Grand Cherokee europeo. La quinta generación del buque insignia de la firma estadounidense acaba de aterrizar en nuestro mercado, aunque no llegará a las calles hasta dentro de unos meses, por lo menos hasta principios de 2022, de hecho, todavía no sabemos cuánto costará.
A diferencia del modelo que se vende al otro lado del charco, este Jeep Grand Cherokee, que pierde la L en su apellido, es un poco más corto, concretamente 28,9 cm, conformándose con una longitud de 4,91 metros, en lugar de los 5,20 m de Grand Cherokee L. Este tamaño encaja mejor con el resto de mercados, aunque para adaptarse pierde la tercera fila de asientos, por lo que únicamente estará disponible con la configuración de cinco plazas.
Eso sí, el interior es tan lujoso y tecnológico como el del Grand Cherokee L, desde luego mucho más que el de la generación anterior. Jeep asegura que la calidad del habitáculo también ha mejorado, con ajustes de mayor calidad y materiales propios del segmento premium, muchos de ellos hechos a mano. De esta forma, nos encontramos un interior totalmente digitalizado con una pantalla táctil central de 10,1 pulgadas con el sistema de infoentretenimiento Uconnect 5 y una pantalla auxiliar, situada delante del copiloto, de 10,25 pulgadas, así como un sistema de entretenimiento para los asientos traseros con Fire TV integrado, además cuenta con un retrovisor central digital, un nuevo Head-Up Display de 10 pulgadas, Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, asistente virtual Amazon Alexa, punto Wi-Fi, navegador TomTom y un potente equipo de audio Mcintosh con 19 altavoces y 950 vatios.
Esta dotación tecnológica se completa, entre otras cosas, con un sistema de iluminación ambiental led personalizable, cargador inalámbrico o unos asientos delanteros eléctricos ajustables en 16 posiciones con memoria, calefacción, ventilación y masaje. Y a este equipamiento hay que sumar una larga lista de sistemas de asistencia a la conducción, entre los que destaca la cámara de visión noctura, el asistente de colisión en cruces, la cámara de 360 grados con limpieza delante y detrás o la nueva función de conducción semi autónoma a través del Active Driving Assist.
A nivel técnico, lo interesante es que el nuevo Jeep Grand Cherokee se asienta sobre una plataforma nueva y diseñada específicamente para este coche que es compatible con los tres sistemas Jeep 4×4 más avanzados (Quadra-Trac I, Quadra-Trac II y Quadra-Drive III), con la suspensión neumática Quadra-Lift, con el sistema de control de tracción Selec-Terrain con cinco modos de conducción y con mecánicas eléctrificadas.
Gracias a ello, Jeep promete que estamos ante el Grand Cherokee más eficiente y con mejores capacidades todoterreno desde el nacimiento del modelo en 1992. No sabemos si, como aquél Grand Cherokee de principios de los 90, el actual podrá subir las escaleras del Cobo Hall de Detroit, pero la marca americana asegura que cuenta con todo lo necesario para arrasar en el campo, sobre todo si se trata de la variante Trailhawk, equipada con neumáticos All-terrain de serie, cámara todoterreno, la citada suspensión neumática Qadra-Lift con hasta 28,7 cm de distancia libre al suelo, mejores ángulos de ataque, salida y ventral, así como la caja de transferencia activa Quadra-Drive con eLSD (diferencia trasero autoblocante electrónico).
A nivel mecánico, son tres los protagonistas. El motor de acceso es un Pentastar V6 gasolina de 3.6 litros fabricado íntegramente en aluminio que desarrolla 293 CV y 352 Nm de par, siempre ligado a un cambio aumático TorqueFlite de ocho velocidades. Con la mecánica de seis cilindros, el Grand Cherokee tiene una capacidad de remolque de hasta 2.812 kg y una autonomía estimada de unos 805 km. Por encima, se ofrece un V8 gasolina de 5.7 litros con tecnología de desactivación de cilindros que entrega 357 CV y 528 Nm de par, suficiente para garantizar una capacidad de remolque de hasta 3265 kg. El bloque de ocho cilindros en uve también se asocia a la transmisión TorqueFlite de ocho marchas.
El Grand Cherokee se vuelve híbrido enchufable
Pero la principal novedad es el conjunto híbrido enchifable 4xe, que combina un motor turboalimentado de cuatro cilindros y 2.0 litros con dos motores eléctricos y un cambio automático de ocho velocidades. La potencia combinada de este sistema híbrido enchufable es de 375 CV y produce 637 Nm de par máximo, mientras que una batería de iones de litio de 17 kWh de capacidad permite recorrer hasta 40 kilómetros de forma completamente eléctrica, por lo que el Grand Cherokee 4xe tendrá la etiqueta CERO; la autonomía total será de unos 700 km.
En lo que respecta a la gama de acabados, son siete los niveles disponibles: Laredo, Altitude, Limited, Overland, Trailhawk, Summit y Summit Reserve. Todos pueden combinarse con el motor V6, pero el V8 sólo se ofrece con los Overland, Trailhawk, Summit y Summit Reserve, mientras que el 4xe está disponible con los Limited, Trailhawk, Overland, Summit y Summit Reserve. Pronto conoceremos los precios de toda la gama.
