Si buscas un SUV «a secas» tienes mucho donde elegir; si además quieres que sea amplio y divertido de conducir encontrarás opciones. Cuando añades la variable de la tecnología híbrida, la cosa se reduce; y si quieres poder utilizarlo todos los días, incluso en ciudades en días de alta contaminación, no queda mucho donde mirar. Sobre todo a un precio medianamente razonable. Kia ya anunció todas estas características para su PHEV cuando lanzó el primer Niro «híbrido a secas» y sobre el papel parecía una buena idea.
Porque a las virtudes del Niro -amplitud interior, comportamiento dinámico sobresaliente y conducción divertida, tecnología de vanguardia…- sumaba la posibilidad de circular en modo eléctrico, sin emisiones durante 58 kilómetros y hasta 120 km/h. Y eso convertía al Niro en una gran idea. En la realidad es aún mejor.
Porque, como hemos comprobado en la presentación nacional, el Niro PHEV es ideal para todos los días, como coche único. Sus 141 caballos permiten que se enfrente sin complejos a cualquier reto, incluso viajes a plena carga. Y su autonomía eléctrica permiten recorrer los trayectos cotidianos de más del 80 por ciento de los usuarios sin emitir ni un gramo. Y todo ello con el comportamiento y tacto de coche de verdad que hace muy divertida la conducción. Porque además de los modos híbrido o eléctrico que se seleccionan presionando un botón se puede elegir un comportamiento más dinámico en el modo Sport; al mover hacia la izquierda la palanca de cambios elegimos esta variante en la que cambia el sonido, se acortan las marchas y nos permite cambiar con la palanca haciendo un uso manual del coche… Solo faltan unas levas para que la sensación sea perfecta.
En todos los modos el coche muestra empuje y carácter (desde 0 ofrece 170 Nm de par) y tiene como aliado un cambio automático de doble embrague y seis velocidades rápido y suave. Y los frenos, con el tacto y la progresividad precisas, redondean el comportamiento. Y si hablamos de dinámica, la ubicación de las baterías, colocadas bajo el asiento trasero, favorecen un aplomo en curva al que te acostumbras inmediatamente. No están nada mal sus prestaciones, sobre todo los 120 km/h que alcanza en eléctrico; pero están mucho mejor si comparamos estas prestaciones con el consumo que homologa.
La contrapartida a todas sus virtudes está en un precio elevado, sobre todo comparado con la versión híbrida -y si no se renueva el Plan Movalt de ayudas a la compra-. Pero si por autonomía eléctrica esos 58 kilómetros son suficientes para nuestro uso diario, conviene hacer cuentas. El Kia Niro PHEV puede ser un buen negocio… Y muy divertido.
Kia Sorento. Gana en refinamiento
Aunque sin grandes cambios en el estilo o el diseño, Kia pone al día el Sorento con pequeñas pinceladas en el exterior (parrilla en negro, nuevo diseño de paragolpes, grupos ópticos o llantas…) y también el interior, donde es nuevo el volante. Y suma el acabado GT Line con estriberas laterales, escape cromado, faros antiniebla con cuatro luces o las pinzas de freno en rojo para ganar estilo juvenil. También estrena sistemas de asistencia a la conducción como detección de fatiga del conductor, asistente de mantenimiento de carril, luces dinámicas con iluminación en curva…
Se mantiene el propulsor 2.2 CRDI de 200 CV con tracción 4×2 o 4×4. Y estrena un cambio automático, de 8 relaciones, ya usado en el Stinger, con el que reduce el consumo de 6,8 l/100 km a 6,2.
