Cuesta creerlo, pero el pasado año 2023 el Kia Sportage cumplió nada menos que tres décadas entre nosotros. No en vano, con la desaparición (veremos si de manera definitiva) del Rio, el Sportage es el único modelo que sobrevive de la gama inicial del fabricante coreano cuando aterrizó en España. Eso sí, siendo sinceros, de aquel 4×4 primigenio únicamente queda el nombre.
Y si algo nos ha enseñado su historia es que, exceptuando la primera generación, el ciclo de vida completo de las siguientes entregas no ha superado nunca los seis años, incluyendo la puesta al día intermedia. Por lo que se ve, Kia no tiene la intención de faltar a su cita en esta quinta generación, si bien parece que sobrevivirá unos meses más que sus antecesores.
Las imágenes tomadas en los aledaños del circuito alemán del Nürburgring confirman que Kia está preparando la actualización de uno de sus modelos estrella. En esta ocasión tenemos que agradecerles más que nunca el trabajo de campo a nuestros colegas de SH Proshots, pues como es habitual en la marca (y también en Hyundai) el camuflaje es tan espeso que incluso cuesta distinguir qué modelo hay debajo.
El Kia Sportage adoptará la nueva línea de diseño de la marca
De hecho, hubiese sido prácticamente imposible identificarlo de no ser por las zonas sin camuflar del frontal, obligatorias para dejar sitio a la iluminación. Ahí se aprecia con cierta claridad unas luces que coinciden con las empleadas en los renovados Sorento y Picanto, que a su vez derivan de las empleadas en el Kia EV9 100 % eléctrico y llevan la denominación Starmap. De esta manera, todo parece indicar que el nuevo Sportage adoptará esta línea de diseño, por lo que nos encontraremos con una vista frontal totalmente diferente a la del actual modelo.
En el resto de la carrocería también habrá cambios, aunque de menor calado, mientras que en el habitáculo nos podríamos encontrar con importantes novedades, si bien es pronto para confirmarlo. Según nos indican desde SH Proshots, el nuevo Sportage podría recibir un nuevo sistema de infoentretenimiento de tres pantallas, el estilo de los empleados en los EV9 y EV3. No queremos poner en duda esta información, aunque de momento no nos atrevemos a confirmarlo, más cuando el recién presentado Sorento, hermano mayor del Sportage, no ha recibido tales elementos y sigue recurriendo a las dos pantallas unidas entre sí, ya presentes en el actual Sportage.
Tampoco esperamos grandes novedades en la gama de motores, más allá de una actualización de las versiones híbridas como ha sucedido en el Sorento o en el Hyundai Tucson, primo hermano del Sportage. Curiosamente, tanto la versión HEV como la PHEV han visto reducida su potencia (15 CV en el primero y 13 CV en el segundo), aunque con motores eléctricos algo más potentes; una maniobra claramente enfocada a mejorar la eficiencia. De esta manera, el Sportage HEV pasará de 230 a 215 CV, mientras que el PHEV se quedará en 252 CV frente a los 265 CV actuales.
Respecto al resto es de suponer que se mantendrán las opciones gasolina (con y sin microhibridación) y diésel, así como la posibilidad de optar por motorizaciones asociadas a una caja de cambios manual o automática y, junto a esta última, tracción a las cuatro ruedas. No se espera que haya una versión 100 % eléctrica, pues Kia ya tiene su propia gama cero emisiones y un modelo equivalente por tamaño al Sportage, como es el EV3.
La presentación del renovado Kia Sportage se producirá a principios de 2025, si bien su llegada a los concesionarios aún se demorará unos meses más.
