Fue en el Concurso de Elegancia de Pebble Beach donde veía la luz este exclusivo Kode57, un deportivo que está inspirado en los clásicos que vieron la luz precisamente en el año 1957, como podían ser los Ferrari 250 TestaRossa o los Jaguar XKSS. Se trata de una criatura que ha nacido de los lápices del diseñador Ken Okuyama, que entre otros ha creado máquinas tan especiales como el Ferrari Enzo y este Kode57 es verdaderamente especial.
Desarrollado junto a Novitec Rosso
En su presentación se dieron algunos detalles sobre él, como el que escondía un motor 6.0 V12 atmosférico o que en su puesta a punto habían colaborado los especialistas de Novitec Rosso. Eso hizo saltar las alarmas y ya dijimos que muy probablemente este bólido tan especial tenía un donante que había sido fabricado anteriormente en Maranello.
No nos equivocamos en absoluto, pues finalmente se ha descubierto que este Kode57 toma como punto de partida un Ferrari 599 GTB Fiorano, un deportivo que ha sido reconstruído por completo empleando nuevos paneles para la carrocería en fibra de carbono. Pero eso es sólo el comienzo, ya que también se ha prescindido del techo rígido, al más puro estilo de los Ferrari 599 SA Aperta, se opta por unas singulares puertas y un mínimo parabrisas delantero. Eso ha hecho, que aunque su chasis se haya tenido que reforzar convenientemente, que su peso se haya quedado en unos ajustados 1.450 kilos, unos 300 kilos menos que lo que pesaba un 599 GTB.
Disponible con 620 ó 702 CV
Eso se traducirá en unas prestaciones sobresalientes, a lo que ayuda el que se haya optado por un motor 6.0 V12 atmosférico que es capaz de proporcionar 620 CV de potencia. Ahora bien, también se ofrecerá una versión puesta a punto por Novitec Rosso, la cual eleva su potencia hasta unos sobresalientes 702 CV. Ambos se asocian a una transmisión secuencial de 6 velocidades.
El propio Ken Okuyama aseguró que va a ofrecer un nuevo y exclusivo deportivo cada año. Y por ejemplo, de este Kode57 sólo se van a producir cinco unidades, que se venderán a 2,5 millones de euros la pieza. La primera de ellas ya tiene dueño, ni más ni menos que el boxeador Floyd Mayweather.