Efectivamente, aunque no te lo creas, ya se han vendido nada menos que 1.000 unidades de estos peculiares KTM X-Bow, un ligero deportivo fabricado prácticamente de forma artesanal en fibra de carbono, que es capaz de proporcionar sensaciones al alcance de muy pocos vehículos que pueden circular por carreteras abiertas.
Con un discreto restyling
Aprovechando el lanzamiento de este ejemplar número 1.000, esta firma austríaca ha decidido mostrar el ligero cambio de imagen al que han sometido a este deportivo de 847 kilos de peso. Bien es cierto que las diferencias son mínimas y que se limitan a incorporar nuevas luces diurnas LED, mientras que sus faros delanteros pierden la carcasa transparente que empleaban anteriormente, si bien los KTM X-Bow GT ya prescindían de ellas.
Para ofrecer un mejor comportamiento dinámico, el splitter delantero también se ha rediseñado, al igual que la cubierta del motor, de forma que ofrece ahora una mejor aerodinámica, unida a una mejor refrigeración de su propulsor, que sigue siendo el conocido 2.0 TFSI de origen Audi. KTM asegura que han trabajado también en su corazón, pero no han desvelado ningún dato sobre su potencia ni sobre sus prestaciones. Actualmente hay que decir que las versiones GT erogan una potencia de 285 CV, mientras que los R llegan hasta los 300 CV.
Todavía nos quedaremos con las ganas de saber de lo que son capaces estos actualizados KTM X-Bow.