comscore

La prórroga de las ayudas del Plan Moves III en 2025 decaen tras no aprobarse el decreto ‘ómnibus’

El rechazo al decreto que incluía la prórroga del Plan Moves III ha generado un gran revuelo en el sector del automóvil. Este plan ofrecía ayudas que oscilaban entre 7.000 y 9.000 euros para la compra de vehículos comerciales, así como 4.500 euros para turismos (elevándose a 7.000 euros si se realizaba el achatarramiento de un vehículo antiguo). Estas ayudas estaban destinadas a incentivar la transición hacia vehículos de movilidad sostenible, una acción alineada con los objetivos de sostenibilidad del país.

Pérdida de la deducción en el IRPF

Uno de los puntos más críticos de esta decisión es la eliminación de la deducción del 15% en el IRPF relacionada con la compra de vehículos eléctricos. Esta deducción, que había sido implementada en junio de 2023, ofrecía un incentivo fiscal significativo a los compradores, permitiendo una devolución de hasta 3.000 euros en el impuesto sobre la renta. Sin duda, su eliminación representa un golpe duro para la demanda de vehículos eléctricos, que ya estaba enfrentando desafíos en un mercado cada vez más competitivo.

Desaparecen las ayudas para puntos de carga

El decreto que no fue aprobado también preveía importantes subvenciones para la instalación de puntos de recarga, tanto en áreas urbanas como rurales. Las ayudas alcanzaban hasta el 80% de los costos en localidades con menos de 5.000 habitantes y un 70% en poblaciones más grandes. Esta estrategia era esencial para aumentar la infraestructura de recarga, promoviendo el uso de vehículos eléctricos, y su suspensión genera incertidumbre sobre el futuro de la movilidad eléctrica en regiones menos atendidas.

Reacción del sector automovilístico

Las asociaciones del sector, como la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) y la Asociación de Concesionarios Oficiales en España (Faconauto), han expresado su profunda preocupación tras el rechazo de este decreto. Consideran que esta situación podría provocar un estancamiento en las ventas de vehículos eléctricos, lo cual perjudicará gravemente los objetivos de descarbonización establecidos. Esta falta de apoyo a la compra no solo afectará a los consumidores, sino que también generará responsabilidades fiscales negativas para los fabricantes.

«Sin las ayudas a la compra, se paralizarán las ventas de turismos eléctricos.»

Riesgos económicos

La eliminación de estas ayudas puede resultar en una carga económica para las empresas automovilísticas. Con menos incentivos, es probable que las ventas disminuyan, lo que podría llevar a multas por exceso de CO2 debido al incumplimiento de las regulaciones de emisiones establecidas por la Unión Europea. Esto podría, a su vez, afectar la producción local y crear inestabilidad en el empleo dentro de las fábricas españolas.

La importancia de la sostenibilidad

Con los objetivos de sostenibilidad cada vez más relevantes, el Gobierno español y la Unión Europea han fijado metas ambiciosas para reducir las emisiones de carbono. Las medidas de apoyo a la compra de vehículos eléctricos son especialmente críticas para cumplir con estos objetivos. A pesar de la situación actual, diversas organizaciones están trabajando para asegurar que se implementen políticas más efectivas en el futuro.