Lamborghini está de celebración, y no es para menos, pues su legendario Countach LP500 cumple nada menos que 50 años. Y es que aquel prototipo que dejó al mundo del automóvil con la boca abierta, se mostró al mundo por primera vez en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1971.
El prototipo del Countach LP500 lucía imponente en el stand de Lamborghini, aunque a su lado tenía a otro de los grandes nombres de la compañía, que también se presentaba ese año: el Miura SV; por lo que se puede decir que el 71 fue un año de ensueño para los amantes de la firma del toro. Pero volvamos al Countach.
Un éxito abrumador
Y es que, tras su presentación, el éxito fue tal, que Lamborghini tuvo que acelerar el proceso de transformación de prototipo a coche de producción, debido a la alta demanda que tuvo del modelo.
Parte de la culpa de esto la tuvo su precioso e imponente diseño, que corrió a cargo del legendario Marcello Gandini, Director de Diseño de Carrozzeria Bertone. Gandini fue además quien se decidió por las puertas de tijera, elemento que caracterizaría a cada modelo V12 de la compañía desde aquel entonces en adelante.
Pero es que en este coche hasta el nombre esconde una historia, puesto que proviene de un dialecto italiano que se habla en la región de Piamonte. La historia detrás del nombre empieza en una granja. El prototipo estuvo escondido en una caseta para maquinaria agrícola que había en una granja, durante las fases finales de su producción. Un día, un granjero descubrió el modelo dentro del cobertizo, y con la sorpresa de ver semejante máquina allí dentro, lo primero que le salió por la boca a aquel buen hombre fue: ¡Countach!; una palabra en el dialecto piamontés, que expresa admiración. Así, llegó a oídos de Gandini la primera reacción que había despertado el modelo en un desconocido, lo cual le pareció tan definitorio de lo que querían hacer con el coche, que decidió quedarse con el nombre Countach como definitivo.
Al menos es lo que se cuenta, ya que existen otras historias que narran el nacimiento del nombre de manera distinta. sin embargo, al ser esta la más 'romantica', a mi es la que más me apetece creerme.