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Lavar el coche: Lo estabas haciendo mal, así debes limpiarlo cuando ha llovido barro

La lluvia de barro es un fenómeno meteorológico que puede dañar tu coche y ocurre cuando partículas de polvo y arena en suspensión, transportadas por el viento desde zonas desérticas, se mezclan con la lluvia. Este evento es particularmente frecuente en áreas cercanas a desiertos, como el Sahara, que afecta principalmente a regiones del sur de Europa, incluyendo España. La llegada de estas nubes de polvo sahariano puede provocar escenas sorprendentes, con coches y edificios cubiertos por una capa espesa de polvo.

Es crucial entender que la limpieza del coche tras una lluvia de barro no debe realizarse de inmediato si la precipitación continúa, ya que nuevas capas de barro seguirán acumulándose. Lo ideal es esperar hasta que el fenómeno haya cesado por completo. La paciencia es esencial para evitar el trabajo doble y minimizar el riesgo de dañar la pintura del vehículo.

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Pasos para una limpieza eficiente del coche tras la lluvia de barro

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  • Preparación Inicial: Antes de comenzar con la limpieza, asegúrate de tener a mano todos los productos y herramientas necesarios. Los expertos recomiendan iniciar el proceso aplicando un líquido en la superficie del coche. Puede ser agua, cera o jabón, lo que ayudará a lubricar el exterior y facilitar la eliminación del barro sin causar daños.
  • Uso del Limpiaparabrisas: Una vez que la superficie del coche está bien lubricada, utiliza el limpiaparabrisas para limpiar el parabrisas. Es crucial realizar este paso después de haber aplicado el líquido, ya que pasar el limpiaparabrisas sobre una superficie seca puede rayar el cristal y dañar los elevalunas.
  • Primera Limpieza en la Gasolinera: A pesar de que la lluvia de barro pueda continuar, es recomendable acudir a una gasolinera o punto de lavado lo antes posible para eliminar la capa más gruesa de polvo y barro. Usa una manguera de autoservicio para este propósito, aplicando un chorro de agua a presión sobre todo el vehículo. Este paso es esencial para evitar que los rodillos del túnel de lavado rayen la pintura.
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