Sin lugar a dudas, uno de los mayores placeres de conducir un descapotable es sentir el viento en el pelo. Los chicos de Lexus han trabajado para que el nuevo LC Cabrio ofrezca un confort superior en su interior, con la capota subida o bajada. El objetivo era evitar que el aire frío enfríe la parte inferior del cuerpo, al tiempo que se gestiona la temperatura y la corriente de aire en torno a la cabeza.
Cuando se recoge la capota, el habitáculo del LC Cabrio cambia completamente, por lo que se introdujeron una serie de ajustes en el climatizador para mantener la temperatura idónea. Gracias a un sistema que detecta si la capota está colocada o no, el aire acondicionado se ajusta automáticamente. Cuando la capota está bajada, se calcula la temperatura y el caudal del aire acondicionado a partir de factores como la cantidad de luz solar, la temperatura exterior y la velocidad del vehículo. Además, unos calefactores ajustables integrados en los reposacabezas aportan aire al cuello, sintiendo el calor al instante.
Asistente climático
El Lexus Climate Concierge se encarga de controlar el aire acondicionado y la calefacción de los asientos, los reposabrazos y el volante, teniendo en cuento si la capota está subida o bajada. Además, detecta si un asiento está ocupado o no, apagando los calefactores para ahorrar energía.
También se han introducido una serie de detalles aerodinámicos adoptando la filosofía Omotenashi, centrada en las personas. Tras estudiar cómo fluye el aire con la capota bajada, los chicos de Lexus diseñaron una línea de cintura que recorre los laterales del vehículo y asciende tras el borde posterior de las puertas hasta converger con la superficie de la tapa del maletero. Con ello, se suavizan las corrientes de aire. Además, los asientos posteriores disponen de un deflector de viento transparente para ofrecer un habitáculo silencioso a velocidades de hasta 60 km/h.