Lexus fue pionera, en 1998, en la fabricación de SUV premium con su RX, el modelo de mayor éxito de su historia, del que ha vendido más de 2,2 millones de unidades desde entonces. En estos años, el RX, el primer todocamino que apostó por la tecnología híbrida, ha visto cómo se multiplicaban los SUV premium con rivales del porte del Audi Q7, BMW X5, Mercedes GLE, Porsche Cayenne, Range Rover o Volvo XC90.
Y viendo lo que tiene enfrente, en la marca japonesa han echado el resto en la renovación del RX. El nuevo modelo mejora los aspectos en los que Lexus es maestra: el refinamiento, la calidad, la tecnología y la apuesta híbrida… Y también progresa en otros en los que no estaba al mismo nivel, como el comportamiento dinámico. Porque los anteriores RX parecían más pensados para el mercado americano; coches cómodos, grandes pero con poco picante; un tanto aburguesados.
Pero ahora la cosa cambia y el nuevo RX muestra al volante y en su comportamiento dinámico un toque mucho más europeo, unas sensaciones al volante más deportivas.
Un diseño muy personal
Las mismas sensaciones que transmite su personal diseño de líneas angulosas y frontal con la forma de doble flecha que aquí tiene un aspecto imponente. También dispone de intermitentes de LED dinámicos, cuyo haz de luz se va encendiendo en la dirección del intermitente hacia donde queremos hacer el giro.
El resultado visual es un aspecto más deportivo, menos voluminoso. Y eso que el coche es más largo (12 centímetros más de longitud) y más ancho, aunque mantiene la altura. El incremento de la longitud va, sobre todo a la distancia entre ejes, ahora 5 centímetros mayor para ofrecer más espacio a los pasajeros. Unos ocupantes que disfrutarán del lujo y la comodidad de un interior realizado con el mimo habitual. Materiales nobles: cuero, madera impresa con láser, con la misma técnica que Yamaha utiliza en sus pianos…
Un refinamiento que se suma a un equipo de confort tremendo, con calefacción o refrigeración en los asientos delanteros, control eléctrico de los traseros (también se puede realizar desde el maletero, para plegar los respaldos y aumentar así la capacidad de carga); un climatizador que detecta la presencia de pasajeros en las plazas traseras, activándose cuando hay ocupantes. O la apertura del maletero con sólo acercar la mano al emblema trasero, aunque tarda unos segundos que, si vamos cargados, se nos hacen un poco 'eternos'.
Comportamiento más a la europea
El último de los aspectos en el que Lexus ha trabajado a conciencia es la 'puesta en carretera', el comportamiento del coche. Y ahí tampoco han 'reparado en gastos'. Se ha retocado la dirección asistida eléctrica para ofrecer más información al conductor, el sistema de suspensión (McPherson delante y doble horquilla detrás) se ha actualizado y se le ha añadido una estabilizadora delantera más grande para mejorar la rigidez. Y el motor se mantiene fiel a su apuesta híbrida; un V6 de 3,5 litros de cilindrada con 262 caballos en la parte térmica y dos eléctricos, uno sobre el eje delantero y otro sobre el trasero. Todo ello gestionado por un cambio automático de variador CVT de 6 velocidades, que impulsan al RX 450h con mucho brío.
Al momento de ponerte en marcha se olvidan esos reparos que generan los modelos híbridos en cuanto a su excesiva 'suavidad'. Los 313 CV están dispuestos siempre cuando se los necesita. El cambio automático es rápido aunque genera un sonido, casi un zumbido, que a veces parece más al ruido de un scooter.
El comportamiento en marcha es intachable, aunque llevemos un coche de más de 2.100 kilos y casi 5 metros de longitud. Tiene un feeling deportivo que le permitirá dar respuesta a lo que buscan los conductores más dinámicos en las marcas rivales de Lexus. Se sujeta muy bien en las curvas y la suspensión adaptativa (sólo está en los acabados Luxury y F Sport) unida a las estabilizadoras activas reducen el balanceo, aunque a alta velocidad generan una cierta sensación de flotabilidad a la que hay que acostumbrarse.
Cuenta con cuatro modos de conducción: EV (se mueve solo en eléctrico, únicamente por debajo de 60 km/h y durante unos dos kilómetros), ECO, Normal y Sport (con una variante denominada Sport+ en las variantes con suspensión adaptativa).
La gama, formada por seis versiones (Eco, Corporate, Executive, Executive Tecno, F Sport y Luxury) oscila entre 63.200 y 91.700 euros.
Tecnología: despliegue de medios
No ha 'reparado en gastos' Lexus en el apartado de la tecnología. Pantalla táctil de 12,3 pulgadas que se puede dividir en tres secciones con tres informaciones diferente, un 'head up display' de 10 pulgadas… Pero sin duda la gran estrella es Lexus Safety System+ que engloba elementos como la seguridad precolisión, el aviso de cambio de carril, control de crucero con radar dinámico…
Otro gran avance es la suspensión variable adaptativa AVS y el sistema de suspensión estabilizadora activa. El primero controla la fuerza de la amortiguación en cada rueda de forma que adecúa esa fuerza a las condiciones de la calzada para mejorar el confort y reducir el balanceo. El segundo cuenta con un control Skyhook Roll que calcula la fuerza de amortiguación que sufre cada rueda en cada momento y crea simultaneamente una fuerza contraria al estabilizador que mantiene el coche plano, como si fuera flotando y evita el balanceo.
