Parece ser que las carreras de resistencia off-road se están convirtiendo en un sensacional escaparate para los nuevos fabricantes que se han animado en el emergente segmento de los pick-up eléctricos. Y es que si hace unos días era Rivian quien participaba en el Rebelle Rally con uno de sus R1T, ahora son los chicos de Lordstown Motors quienes disputarán una de las carreras off-road más exigentes del planeta, la San Felipe 250, que se disputa en Baja California.
Pero esta carrera que es la primera cita del calendario World Score Desert Championship de este año, no la disputarán con una unidad de serie, sino con uno de los chasis fabricados por Lordstown para el desarrollo de su Endurance. Concretamente lo llaman Beta Endurance.
Semejante carrera comienza y termina en San Felipe, México y se ejecuta en un circuito que tiene 290 millas de longitud (467 kilómetros) y que es el mismo que se emplea en la Baja 1000.
Tiene unas baterías con 109 kWh
Los ingenieros de la firma americana aseguran que su Beta Endurance presenta ventajas como un bajo centro de gravedad gracias a que sus baterías de 109 kWh de capacidad se posicionan en la parte inferior de su chasis de largueros. Sin embargo esa disposición les ha obligado a tener que reforzar y proteger esa zona para estas baterías no sufran. Mantendrá la disposición de cuatro motores colocados en el interior de las llantas como en los Endurance de calle, que aseguran una autonomía de 250 millas (402 kilómetros), que podrían ser un problema debido a la distancia a cubrir en esta San Felipe 250.
Lordstown tendrá que tener en cuenta los tiempos de recarga, pero podrían casi ni existir, porque este Beta Endurance al ser más ligero que el pick-up a la venta, podría alargar incluso esa autonomía.
Pero ahora habrá que esperar para ver de lo que es capaz de hacer en el cuerpo a cuerpo.
