341.363.840 millones de euros. Es el importe total de las multas formuladas por el Ayuntamiento de Madrid el año pasado. En concreto, fueron 2.603.669 denuncias de tráfico que, a pesar de ser menos que las del año anterior (en 2022 se batió el récord con 2.702.125 multas), aumentan su importe en un 1,2%, alcanzando una cifra nunca antes vista de facturación cercana al millón de euros diarios.
Entre las multas más frecuentes, el primer lugar lo ocupan las denuncias por estacionamientos prohibidos, con las que en 2023 se recaudaron 99.722.270 millones de euros. Los excesos de velocidad son la segunda causa más frecuente de denuncia, con una recaudación de 59.426.500 millones de euros.
Pero la multa que más ha llenado las arcas del Ayuntamiento es el acceso indebido a la Zona de Bajas Emisiones de Especial Protección del Distrito Centro, con la que se han recaudado 109.878.000 millones de euros, según los datos de la asociación Automovilistas Europeos Asociados (AEA).
1Más multas graves
AEA ha analizado un año más las multas de tráfico que el Ayuntamiento pone en la capital destacando que las denuncias del pasado año les han costado más a los ciudadanos porque han bajado las infracciones calificadas como leves (-13,8%), como pueden ser los estacionamientos prohibidos o estacionamientos en zona SER con tarjeta no válida, pero han aumentado de forma significativa las infracciones graves (6,7%) o muy graves (7,9%).
Esto supone que el importe medio de las multas que el Ayuntamiento de Madrid impone en la capital ha aumentado unos seis euros en el último año, pasando de 124,7 € a 131,1 €.
Entre esas infracciones calificadas como graves, el informe de AEA señala que aunque ha habido una notable reducción de las multas que el Ayuntamiento ha impuesto por rebasar el semáforo en rojo (-18,2%) y por acceder vehículos sin etiqueta a las Zonas de Bajas Emisiones de la Plaza Elíptica (-53%) o a la M-30 (-31,9%), se han incrementado infracciones como, por ejemplo, no utilizar el cinturón (27,2%), llevar a los menores sin el correspondiente SRI (sistema de retención infantil, 33,8%), el uso del teléfono móvil (16,2%) y los excesos de velocidad (7,1%).