La reciente irrupción de las marcas chinas en el mercado de vehículos eléctricos en España ha capturado la atención de los consumidores españoles. Un estudio presentado por Toluna y las consultoras PONS Mobility y Nort3, en el marco del Observatorio de Movilidad de la Asociación de Marketing de España (AMKT), revela lo que los españoles piensan de las marcas del gigante asiático.
Más de la mitad de los españoles considera a las firmas chinas como piezas clave en el desarrollo e impulso de los vehículos eléctricos en el país. Según un reciente estudio, el 56% de los usuarios cree que la entrada de estos fabricantes al mercado español, con modelos más económicos, fomentará una alta demanda de vehículos eléctricos en España.
El evento, celebrado en Madrid, reunió a expertos y profesionales del sector para debatir sobre el futuro de la movilidad, destacando la importancia de una nueva regulación que favorezca los desplazamientos sostenibles y seguros. Ramón Ledesma de PONS Mobility y Natacha Lerma de Toluna subrayaron la necesidad de políticas fiscales innovadoras y la creciente influencia de las marcas chinas en el mercado español.
1Inteligencia artificial, eficiencia y conectividad
El estudio, presentado por Toluna y las consultoras PONS Mobility y Nort3 en el Observatorio de Movilidad organizado por el Comité de Marketing de Movilidad de la Asociación de Marketing de España (AMKT), también revela una percepción positiva sobre la contribución de estas marcas chinas en la generación de empleo y la innovación en el sector automotriz. Esta visión favorable es especialmente notable entre los menores de 35 años, quienes son los principales seguidores de las marcas chinas, con un 56% de apoyo.
En el evento, se abordaron temas como la integración de tecnologías inteligentes, la eficiencia y la conectividad, así como el uso de tendencias disruptivas. Además, se destacó la importancia de las marcas europeas, que siguen siendo las más valoradas por los usuarios españoles, con un 71% de aceptación. Le siguen las marcas asiáticas de Japón y Corea del Sur con un 18%, mientras que las americanas y chinas se sitúan en un 7% y 4% respectivamente.