Los chicos de Mazda han tenido a bien mejorar la cuarta generación del roadster más legendario de todos los tiempos, su carismático Mazda MX-5. Estéticamente no hay cambios de diseño si exceptuamos de que ahora ofrece nuevos diseños para sus llantas de aleación, mientras que será en su habitáculo donde nos encontremos con un nuevo volante, además de con una nueva pantalla TFT central. Quienes se decanten por la versión de techo de lona, este elemento ahora puede ser de color marrón, a juego con el tono de un nuevo tapizado en cuero para sus asientos.
Cuando se lance en Japón, cosa que va a suceder el próximo 26 de julio, los Mazda MX-5 contarán de serie con elementos de seguridad activa como es la frenada de emergencia en ciudad y la advertencia por salida de la vía.
Más potencia para los Skyactiv-G
Pero es debajo de su afilado capó donde más ha trabajado la firma nipona, pues los de Hiroshima han metido mano a sus dos motores de gasolina. Comenzando por el más potente de la gama, el 2.0 Skyactiv-G, decir que estrena un nuevo sistema de admisión, nuevas culatas, pistones revisados, bielas mejoradas… Mazda asegura que además de incrementar la potencia, se ha reducido el peso del bloque, pero no ha dado cifras al respecto, salvo una ganancia de un 15%, además de que presumen de que la zona roja ha pasado de 6.800 a 7.500 rpm. Más para disfrutar de este ligero roadster con propulsión posterior.
Sin embargo los primeros datos se han filtrado. En ellos se ha dado a conocer que la potencia final del 2.0 Skyactiv-G ha pasado de 160 a 185 CV, mientras que su par motor se eleva de 200 a 205 Nm. De prestaciones ni una palabra, pero serán mejores que las actuales al igual que su eficiencia ha salido reforzada.
El 1.5 Skyactiv-G recibe la tecnología de combustión de su hermano mayor. Eso le ha permitido escalar de 130 a 135 CV, mientras que el par motor pasa de 150 a 152 Nm.
Aunque todavía queda tiempo para su lanzamiento en Japón (de Europa no se sabe nada por el momento) ya se sabe que allí sus precios van a oscilar entre los 2.554,200 yenes y los 3.812,400 yenes. Eso equivale a entre 16.620 y 29.290 euros.