Si entras en la página Web del exclusivo concesionario Tom Hartley Jnr, que está situado en las proximidades de Birmingham, en el Reino Unido, podrás encontrate con máquinas tan especiales como dos Ferrari Enzo, dos Bugatti Veyron, un Pagani Huayra y mucho más. Eso sin olvidarnos de que por sus instalaciones han pasado criaturas tan excepcionales como este McLaren F1 del año 1997 con tan sólo 239 kilómetros en su odómetro.
Pero ahora este elitista concesionario busca un nuevo hogar a otra máquina verdaderamente especial, pues se trata de un McLaren P1, pero no una unidad cualquiera, pues en su carrocería se puede leer la denominación 'XP05'.
Uno de los 14 prototipos
La factoría de Woking dio por finalizada la producción de este deportivo híbrido cuando salió la unidad #375. Ahora bien, la firma británica construyó inicialmente 14 prototipos de desarrollo, los conocidos como XP 'eXperimental Prototype' y este que tienes ante tus ojos se trata del quinto de ellos y con el número de chasis #990006. Se trata de una pieza excepcional, porque apenas un puñado de ellos sobrevivieron a las 'perrerías' a las que fueron sometidos durante las fases de desarrollo.
Esta unidad ha viajado por medio mundo soportando las más duras pruebas, pues esta unidad nació para desarrollar su transmisión automática y también el sistema de inyección, fabricado por Bosch. Cuando finalizó con sus tareas, este McLaren P1 XP05 regresó a Woking y allí fue transformado en un McLaren P1 GTR, pero sólo a nivel estético. Y esta unidad transformada estuvo expuesta en los salones de Ginebra y Nueva York.
Fabricado por MSO
Poco después, esta criatura fue desmontada hasta quedar en el chasis de fibra de carbono, que fue adquirido por un cliente especial, quien acabó finalmente por recurrir a los servicios del artesanal departamento de personalización MSO. Dicho cliente quiso devolver ese chasis a la vida y McLaren Special Operations así lo hizo, instalando un nuevo motor, nueva carrocería, suspensiones, interior… Pero la 'broma' ha podido salir por un ojo de la cara, o los dos.
Independientemente de la cuantía económica pagada por él, su primer y único cliente hasta el día de hoy lo encargó en el inconfundible color McLaren Orange, respetando los emblemas 'XP 05' en su exterior y también en los asientos.
Ahora y tras conducirlo a lo largo de apenas 323 millas (unos 520 kilómetros), su dueño está dispuesto a deshacerse de esta pieza que ayudó a desarrollar uno de los mejores deportivos de los últimos tiempos.
Si te lo quedas, junto al vehículo te entregarán una reproducción exacta a escala, los libros originales, manuales, además de un archivo documentado explicando paso a paso cada uno de los momentos vividos por este McLaren P1 XP05.
Si lo quieres, no te va a salir barato. Y si te enteras de precio, nos lo cuentas.