Con motivo del Festival de la Velocidad de Goodwood, los chicos de McMurtry Automotive presentarán en sociedad su brutal Spéirling. Es cierto que ni el nombre de la compañía ni el del modelo les sonará, de hecho, tendrán que leerlos despacito porque, al menos para un español, tienen tela…, sin embargo, el coche es de lo más interesante.
Listo para la pista
La compañía no ha querido desvelar muchos detalles al respecto, por que se están reservando para dar el golpe encima de la mesa a la hora de la verdad, pero sí que han descrito el Spéirling como un prototipo de circuito puramente eléctrico. Es decir, un animal de competición. Tampoco nos dice mucho, pues con las fotos facilitadas ya veíamos la dirección que iba a tomar. Es un coche que parece listo para competir en resistencia, al menos hasta que lo ves de perfil, que es cuando te das cuenta de las proporciones 'extrañas' que tiene, con un capó muy alargado y una zaga muy corta. En el centro del coche tenemos el cockpit, al más puro estilo de los coches de competición más extremos. A los lados, rodeando las ruedas de manera fluida, los pasos de rueda aerodinámicos le dan un toque más especial al coche, así como las luces delanteras en forma de 'i' o las cuatro luces de freno posteriores.
McMurtry también ha comentado que quieren que el futuro sea eléctrico, que los coches y la movilidad sean respetuosos con el medio ambiente,pero que no por ello se deba perder la pasión o la diversión en la conducción. Como colofón a este 'discurso', han dejado entrever que puede que sea el coche eléctrico más rápido del planeta. Aunque para afirmar esto, habrá que verlo en acción primero.