Uno de los clásicos motivos de accidentes tiene que ver con el cansancio. Muchas veces lleva a los conductores a quedarse dormidos al volante porque conducir con sueño es muy peligroso. Por mucho que sucedan desgracias por culpa de ello, nunca somos totalmente conscientes de la gravedad que supone. Creemos ignorantemente que siempre lo podemos combatir… y eso ya es en sí un problema.
¿Sabías que el cansancio durante la conducción provoca en torno a 100.000 accidentes al año en todo el planeta? Te sorprenderá saber que es una situación que los expertos equiparan a haberse tomado seis latas de cerveza antes de ponerse al volante. Si estás fatigado, es mejor no conducir y, sobre todo, descansar bien antes de salir. De lo contrario, no solamente nos estaremos poniendo en peligro nosotros mismos, sino también al resto de ocupantes del vehículo y a todos los coches con los que nos crucemos en el trayecto.
2Haz paradas con asiduidad si te entra sueño
Intenta no conducir muchas horas seguidas porque esto va a ser el primer paso para que te entre sueño. Haz descansos de vez en cuando en áreas de servicio y camina un poco para despejarte y estirar las piernas. Mantenerte activo físicamente, aunque sea mínimamente, te ayudará a combatir de manera frontal y total el cansancio. Lo ideal es parar al menos cada dos horas para tomar un reavivador café… y, ya de paso, para lavarte la cara y despejarte un poco.