La transición hacia una movilidad más sostenible ha generado un aumento en la demanda de vehículos menos contaminantes. Los coches microhíbridos, o híbridos ligeros, han ganado popularidad como una opción accesible para obtener la codiciada etiqueta ECO.
Este distintivo, que otorga beneficios en muchas ciudades, se ha convertido en un atractivo tanto para conductores como para fabricantes, al permitir la circulación en Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) y ofrecer ventajas fiscales. Pero ¿qué hace que esta tecnología sea tan especial y cómo funciona realmente?
5¿Son los microhíbridos una solución a largo plazo?
Los coches microhíbridos son una solución intermedia en el camino hacia una movilidad más limpia. Si bien no ofrecen la misma eficiencia que los híbridos enchufables o los eléctricos, cumplen con las normativas actuales de emisiones y permiten a los fabricantes mantener sus gamas de vehículos dentro de los límites impuestos por la Unión Europea.
Para los usuarios, son una opción asequible y práctica en un entorno regulatorio cada vez más estricto. Sin embargo, a medida que las tecnologías eléctricas y de hidrógeno se desarrollen y los costos asociados disminuyan, es probable que los microhíbridos pierdan protagonismo. A corto plazo, siguen siendo una opción atractiva; pero a largo plazo, el futuro parece inclinarse hacia opciones más sostenibles y tecnológicamente avanzadas.
